Sin saber cómo, no puedes evitarlo. Quisieras estar bien, que fuera diferente. Pero al mismo tiempo a una parte de ti le gusta considerar los diferentes posibles medios para llegar a una conclusión final que, curiosamente, parece siempre ser la misma, y te lleva continuamente a las mismas preguntas y al típico "por qué tiene que ser todo tan difícil" . Tiene punto de partida pero no de llegada.
Volverás a pasar por el mismo estúpido camino sin pensar que por ahí ya has estado más de una vez y que por lo tanto, es inútil seguir en esa dirección. Pero en ese momento... qué más da. No te importa, te aferrarás a ello y no razonarás. Quieres una conclusión que te agrade, y la quieres ya.
Pero es que realmente conoces todas tus opciones...?
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